viernes, enero 11, 2013

PECAS.



Saberte me acaramela
y al oírte me escurro
en la silla, donde esté,
derretido,
cual melaó,
propicio estado

para verterme en ti
donde quiero yacer,

desparramado,
sin alícuotas,

arriesgado al tedio,
amando

tu arsenal de pecas
y ese universo de historias

que contiene cada una
para ir leyendo (te)

en braille susurrado,
a dedos, a lábios,
una hoja tu pecho
una a otra tu envés

Ángel Rivero
Diciembre 24, 2012